Tratando Con Compañías de Seguros Después de un Accidente Automovilístico

TENGA EN CUENTA: Este artículo no pretende ser un consejo legal, y no es un sustituto de un abogado con licencia. Si has sido lesionado en un accidente automovilístico y tienes preguntas, comunícate con un abogado. Puedes comunicarte con nuestra oficina al (360) 733-3966.

Es un hecho desafortunado que muchas compañías de seguros en los Estados Unidos no traten a las personas lesionadas de manera justa. Su negocio es asegurar a las personas contra el riesgo, pero con demasiada frecuencia, cuando ocurre el peor de los casos, buscarán todas las formas de pagar lo menos posible. Pero la idea de tener o de pagar un seguro es adquirir una compensación justa en esos peores escenarios. Es por eso que todos pagamos mucho dinero en primas para nuestra cobertura de seguro cada año.

Si te lesionas en un accidente automovilístico sin culpa propia, la ley te otorga el derecho a una compensación justa por: (1) tus facturas médicas; (2) tu salario perdido, si tienes que faltar al trabajo debido a tus lesiones y citas médicas; (3) tu dolor, sufrimiento y estrés; y (4) tus otros gastos razonablemente relacionados con el accidente.

En consecuencia, aunque esperamos sinceramente que permanezcas seguro en el camino y nunca necesites esta información, si sucede lo peor y te lesiones en un accidente automovilístico, hay varias cosas que debes tener en cuenta al tratar con la compañía (o compañías) de seguros involucradas.

Primero, asegúrate de realizar un seguimiento con tratamiento médico para tus lesiones. No evites las citas médicas. A nadie le gusta ir al médico, y entendemos que puede ser inconveniente. Todos tenemos vidas ocupadas, y si estás suficientemente bien como para trabajar después del accidente, puede ser difícil tomarse un tiempo libre del trabajo para ir a citas médicas. Si tienes hijos, puede ser aún más difícil. Pero una de las partes más importantes de un reclamo por lesiones personales es mostrar hallazgos médicos objetivos y diagnósticos de tus lesiones. Comprendemos perfectamente que puedes sentir mucho dolor, pero que simplemente lo estás tolerando porque tienes que trabajar o cumplir con tus otras obligaciones. Pero si no has visitado al médico después del accidente o si no sigues con la terapia física, el tratamiento quiropráctico, la terapia de masaje u otro tratamiento recomendado por tu médico, la compañía de seguros y sus abogados lo usarán en tu contra. Señalarán tu falta de tratamiento médico como evidencia de que no te lesionaste en el accidente. Si duele, ve y hazlo revisar, y mira qué se puede hacer. Es lo mejor para tu reclamo por lesiones personales y, lo que es más importante, es lo mejor que puedes hacer por tu salud a largo plazo.

Segundo, toma fotografías. Toma fotos de la escena del accidente y del daño a todos los vehículos involucrados si tu o un amigo o miembro de tu familia está en condiciones de hacerlo; toma fotos de tu propio vehículo dañado tan pronto como puedas; y toma fotos de tus lesiones si son visibles (como cortes o magulladuras). Estas fotografías pueden marcar una gran diferencia en tu reclamo más adelante; proporciona evidencia objetiva del accidente. Los humanos a menudo piensan y entienden la información de forma más visual, y las compañías de seguros y los abogados defensores de seguros saben que si tu tienes fotografías, tu abogado podrá demostrar mejor la gravedad del accidente y la gravedad de tus lesiones. El viejo dicho de que “una imagen vale más que mil palabras” es muy cierto en la ley de lesiones personales.

En tercer lugar, ten cuidado con las redes sociales. En el mundo actual, las compañías de seguros y los abogados defensores de seguros investigan regularmente las redes sociales como una forma de socavar y atacar los reclamos de lesiones personales de los demandantes. Si estás gravemente herido, pero publicas una imagen en Facebook de ti mismo esquiando, incluso si solo estuvieras en esquís durante 5 minutos y sufrieras demasiado dolor como para continuar, dañará tu caso.

En cuarto lugar, no firmes nada hasta que hayas hablado con un abogado. Desafortunadamente, cuando se trata de reclamos por lesiones, muchas compañías de seguros intentan activamente que los consumidores firmen, y pierden sus derechos antes de que comprendan completamente el alcance de sus lesiones o la compensación financiera a la que tienen derecho por la ley. Un ajustador de seguros puede ofrecerte arreglar tu automóvil, tal vez pagar algunas de tus facturas médicas, e incluso puede ofrecerte $1,000, $2,000 o incluso $10,000 por tu dolor y dificultad, pidiéndote que firmes un formulario de liberación a cambio. Lo que no te dicen es que a menudo, si te ofrecen una solución rápida, tu reclamo puede valer mucho más que la cantidad que están ofreciendo. Su esperanza es que firmes el formulario de liberación sin hablar con un abogado, y luego, si descubres que necesitas una cirugía costosa o varios meses de terapia física o atención quiropráctica dentro de unos meses, bueno . . . te dirán que no hay nada que hacer; que ya has resuelto tu caso y has renunciado a todos tus derechos. Hemos tenido clientes potenciales que acuden a nuestra oficina después de resolver sus reclamaciones por su cuenta, y siempre es difícil decirles que si hubieran acudido a nosotros antes, el caso que resolvieron por $2,500 o $10,000 habría valido tanto como $25,000 o $100,000. No cometas ese error. No siempre es necesario contratar a un abogado, pero espera hasta que hayas al menos hablado con uno antes de firmar algo.

En quinto lugar, no des declaraciones a las compañías de seguros. A menudo te pedirán que presentes una declaración antes de estar completamente preparado para hacerlo, o antes de consultar con un abogado. Cortésmente di que no, habla con un abogado y procede desde allí. Al igual que con la firma de documentos, virtualmente nunca es lo mejor para ti tomar medidas y tomar decisiones rápidamente.

En última instancia, hay muchos otros asuntos a considerar, pero estas son algunas de las primeras cosas que deberías considerar en los días y semanas posteriores a un accidente. Si te has lesionado en un accidente automovilístico que no fue tu culpa y tienes preguntas, no dudes en llamar a nuestra oficina al (360) 733-3966. Las consultas son siempre gratuitas, y estamos felices de hablar de la situación contigo.